5 señales de que la chinchilla está a punto de enfermarse

Chinchilla es un animal pequeño y robusto, conocido por ser resistente a enfermedades. Obviamente, si las condiciones en las que se coloca son malas, terminará enfermándose.

Además, en primer lugar debe asegurarse de que su animal viva en buenas condiciones, que su alimento sea de calidad y que su entorno sea pacífico.

A pesar de toda su atención y cuidado, su chinchilla aún puede enfermarse. Aquí están los 5 signos que lo ayudarán a evaluar la gravedad de la situación.

Índice de contenido

1 – Chinchilla no tiene su comportamiento habitual

Chinchilla es uno de esos animales que no ocultan el hecho de que están enfermos. Su comportamiento está cambiando y podrás darte cuenta de que conocerás bien a tu mascota.

En general, si adoptas un animal doméstico, no es para dejar que se vegetue en un rincón, sino para vivir y compartir momentos con él.

Además, la fase de domesticación es esencial: le permite tejer este enlace maestro-animal en particular, comprender cómo funciona y comprender las características principales de su personalidad, así como los hábitos de estilo de vida que puede implementar. Entonces podrá identificar rápidamente posibles cambios en su comportamiento.

Cuanto antes descubra que algo anda mal con su animal, mejores serán los resultados del posible tratamiento. Muchas patologías empeoran rápidamente, haciendo que la curación sea más larga y, a veces, más difícil, incluso aleatoria.

Además, si su chinchilla es menos activa, parece cansada, incluso apática, permanece postrada en una esquina de su jaula, se alimenta menos o más, no espere para consultar al veterinario. Una chinchilla saludable es naturalmente viva y curiosa.

Por el contrario, si su chinchilla está más agitada de lo habitual, es porque puede sufrir infección del tracto urinario , que está lógicamente acompañada de dificultad para orinar.

Tu chinchilla se mueve constantemente sosteniendo tu cabeza inclinada hacia un lado ? Debe verificar que no tenga una infección del oído.

2 – Verifique regularmente la apariencia y el olor de las heces

La condición de las heces de chinchilla es un indicador infalible de la existencia o no de un problema de salud. Las heces normales son de color marrón, no emiten olor, tienen una consistencia bastante seca y tienen una forma ligeramente ovalada. Normalmente son más importantes por la noche.

Los trastornos digestivos son sin duda los trastornos más frecuentes en la chinchilla porque el sistema digestivo del animal es sensible y reacciona rápidamente en el caso de las bacterias.

La salmonelosis y las listerias causan diarrea severa que aún son riesgos significativos de deshidratación. La diarrea puede ser muy grave y rápidamente fatal. La deficiencia de vitamina C también causa diarrea severa. Solo una inyección de esta vitamina puede salvar al roedor de la muerte.

El estreñimiento deja más espacio para la intervención. Tiene la oportunidad de tratar de resolver el problema dándole una pequeña compota de manzana sin azúcar , a menos que este estreñimiento sea el resultado de una parada de alimentación. Esto también puede ser causado por la ingestión de bolas de pelo durante el inodoro.

La chinchilla estresada o aburrida puede estar inclinada a masticar su cabello: es el llamado fenómeno de «masticación de pieles» que puede causar obstrucción intestinal.

En ambos casos, diarrea y estreñimiento, si no hay una mejora rápida (dentro de las 24 horas como máximo), haga que su chinchilla sea examinada por una salud animal profesional sin demora.

3 – La chinchilla ya no se alimenta ni se hidrata

Ningún animal decide ayunar para perder algo de peso ! La mayoría de los animales domésticos que se sienten bien y cuyos maestros carecen de nociones dietéticas tienden, por el contrario, a aumentar demasiado de peso.

Si nunca se da cuenta de que su chinchilla ya no se alimenta, lo verá perder peso. Pero si este es el caso, es porque los problemas se han resuelto por un tiempo: existe una necesidad urgente de tratar a su animal.

Las maloclusiones dentales son, junto con los trastornos digestivos, la otra categoría más grande de problemas que pueden encontrar las chinchillas.

Sus dientes crecen continuamente y si carecen de la sustancia para desgastarlos, heno en particular, crecen con exceso y todo el equilibrio de la boca se ve comprometido, con formación de heridas dentro de la boca o en la lengua, que necesariamente causan dificultad en la alimentación, así como salivación significativa. Solo el veterinario puede aliviar y curar su chinchilla.

4 – Cambios en la apariencia de la chinchilla

Enrojecimiento, pérdida de cabello, cabello con volantes … Todos estos son signos que deberían alertarlo. La tiña hace que aparezca enrojecimiento en las orejas, la nariz y las piernas, así como la pérdida de cabello. Los sarna causan picazón y la aparición de costras.

Los pelos con volantes son una señal de que la chinchilla descuida el mantenimiento de su pelaje. Como es un instinto y un acto esencial para su higiene y su supervivencia , dicha negligencia debe estar asociada con cambios en el comportamiento del animal.

Cualquiera sea el evento, el veterinario es la única persona capaz de recetar el tratamiento adecuado.

5 – Chinchilla parece tener un resfriado

Chinchilla tiene secreción nasal o parece tener dificultad para respirar ? Una habitación demasiado húmeda, un calado o una ventilación insuficiente contraria pueden haber desequilibrado la salud de su chinchilla.

No espere que el frío sane solo y no espere a reaccionar, ya que puede degenerar rápidamente en bronquitis o neumonía, especialmente si no identifica la causa y no realiza cambios. Cuando la respiración de la chinchilla se vuelve ruidosa y acelerada, es necesario consultar a un veterinario en caso de emergencia .

Los flujos oculares son más un signo de conjuntivitis. Este tipo de problema generalmente se desencadena por basura de baja calidad. El asesoramiento del veterinario será útil para saber cómo aliviar a su pequeño roedor.

Chinchilla puede sufrir calor si las temperaturas exceden los 25 ° C. Se acostará de lado y observará que respira con dificultad. Comprueba si se siente mejor en una habitación más fresca. De lo contrario, consulte a un veterinario sin demora.